jueves, 27 de octubre de 2011

DESORIENTARNOS

“La vida no deja de desorientarnos”. Ese fue el diagnóstico que hice después de realizar semejante foto. Una vez mi paladar se deleitara con un helado, y mis pies hicieran lo propio paseando e intercambiando opiniones al lado de mi amiga Lorena, un ser maravilloso, nos dirigimos al medio de locomoción que nos había trasladado para semejante gozo. Abducidos por la calma de la noche, giramos la cabeza de este a oeste sin ubicar dónde habíamos dejado el coche, hasta que la memoria salió a relucir indicándonos donde estaba situado. Para nuestra sorpresa, apreciamos este letrero publicitario que “colgaba” boca abajo. En ese instante, como ave de paso, se posó en mi cabeza un fragmento de la letra de una de las canciones de Fito y Fitipaldes: “Ya no sé si el mundo está al revés o soy yo quien está cabeza abajo”.

No hay comentarios: