domingo, 10 de septiembre de 2023

EL FIN DE LAS RELACIONES DESPUÉS DE LAS VACACIONES

Leí hace unos días (llevo tiempo ojeando y oyendo sobre ello), que muchas relaciones ponen el "punto final" a su vínculo, tras el final de las vacaciones de verano. Florecen discrepancias o tensiones acumuladas que guardamos durante las tres estaciones restantes. En mi opinión, creo que en una relación de pareja, afrontar crisis no es, necesariamente, un síntoma de "desnutrición" del vínculo. Pero la relación comienza a debilitarse si esas crisis conducen a un empobrecimiento de la unión, es decir, si no las afrontamos con madurez. De ser así, tarde o temprano la relación se agotará, si el afrontamiento de las dificultades conduce a la frustración, la incomunicación y el bloqueo permanentes. ¿Cuál es la clave para que esto no suceda? Sin duda alguna, la comunicación. Pero sobre todo, una "comunicación consciente", donde brille la flexibilidad, la armonía y el equilibrio. Para ello, debemos posicionarnos en un estado equilibrado de empatía, para tener en cuenta las necesidades, pensamientos y sentires del otro. Tambien es cierto que uno puede poner todo de su parte para superar todos los desajustes y cocrear una relación más sinérgica y transformadora; pero, si el otro se resiste porque quizá no tenga el foco puesto donde nosotros lo tenemos, debemos plantearnos hasta cuándo estamos dispuestos a seguir pedaleando en solitario. Cuando pasamos mucho tiempo juntos, la convivencia nos desnuda y es ahí, cuando el otro puede desilusionarse al encontrarnos a nosotros en lugar de la imagen que tan cuidadosamente habíamos fabricado (muy a menudo, también nos había idealizado). Y viceversa. Ese desengaño es imprescindible para relacionarse con autenticidad. Una autenticidad que necesita de: "El trípode de la intimidad", compuesto por; Amor, Atracción y Confianza. Y como cualquier trípode, necesita que sus tres patas sean firmes, porque de lo contrario, cualquier pata que se afloje, hará que el trípode se desmonore. La pareja es tu aliado, no tu enemigo. La rutina diaria, las discusiones y el estrés pueden empujarnos a estar siempre a la defensiva, pero si hay una elección "voluntaria" en la vida, es la de con qué tipo de persona queremos transitar por el mundo. Tenemos pareja para sentirnos queridos, cuidados y apoyados... ¿Qué más se necesita?